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Sailor Worlds

A propósito de Platero

A propósito de Platero

Sr. Dn. Juan Ramón Jiménez
Madrid, febrero de 1929

Nuestro distinguido amigo: Nos creemos en el deber de decirle -sí, desinteresadamente- que su obra nos repugna profundamente por inmoral, por histérica, por cadavérica, por arbitraria.
Especialmente:
¡¡ MERDE !!
para su Platero y yo, para su fácil y mal intencionado Platero y yo, el burro menos burro, el burro más odioso con que nos hemos tropezado.
Y para V., para su funesta actuación también:
¡¡¡¡MIERDA!!!!
Sinceramente,
.......................................................... LUIS BUÑUEL / SALVADOR DALÍ

La historia de esta carta viene dada por el propio Dalí. Lo explica así:

En aquel momento queríamos mandar, para crear una especie de subversión moral, una carta a la persona más prestigiosa de España, únicamente para provocar una reacción y que la gente dijera: ¿Por qué lo han hecho?, y tal y cual. Entonces habíamos escogido dos o tres, y habíamos pensado en Falla, que tenía un gran prestigo, para decirle que era un hijo de puta, etc.: lo más que se puede decir; los pusimos en un sombrero (los nombres), y salió Juan Ramón Jiménez. Justamente acabábamos de visitar a Juan Ramón el día anterior, que nos había recibido sentimentalmente: "A ver, esa juventud maravillosa...", y dijo haber encontrado unos chicos magníficos en nuestro grupo. Entonces, sale en el sombrero y escribimos la carta, que era una carta terrible contra Platero, que el asno de Platero era un asno podrido, aquello de las estrellas era un sentimentalismo...; además, es verdad, a mí nunca me ha gustado Juan Ramón Jiménez, encuentro que es un poeta pésimo. En aquel momento de echar la carta, Buñuel tuvo una duda, pero la echó, la echamos, y al día siguiente Juan Ramón estuvo enfermo, diciendo: "No comprendo, un día antes recibo a estos chicos; me parecen... Y al día siguiente me insultan de la manera más grosera...". Y no lo comprendió nunca. Fue una cosa incomprensible.


Buñuel y Dalí están a comienzos de 1929 trabajando muy estrechamente para gestar el guión de Un perro andaluz, la película que se filmaría en París pocos meses después. Están compartiendo una estética surrealista que les lleva a rechazar todo lo que representa la tradición, la lógica y también la figura del padre, que es lo que había sido para los poetas jóvenes Juan Ramón Jiménez. Éste representaba para ellos lo más putrefacto, palabra de uso compartido para referirse a todo lo rancio y degenerado desde su punto de vista. En la película antes citada hay una escena en que un individuo tira de dos cuerdas que arrastran dos curas maristas, un piano de cola y encima de éste dos burros podridos (¿Platero?). También hay que decir que la imagen del burro podrido venía también sugerida por el aragonés como Buñuel e inquilino de la Residencia de Estudiantes, Pepín Bello, que describió cómo iba a un barranco cerca de su pueblo a ver como se descomponían los burros muertos. Se les hinchaba el vientre y luego estallaban para regocijo del amigo Pepín Bello.

5 comentarios

Toñín -

Juan Ramón y la locura fueron de la mano durante gran parte de la vida del poeta, con constantes visitas al psiquiátrico. Creo que hasta llegó a pedir perdón por su Platero; todo esto, en mi opinión, embellece aun más su propuesta literaria, su válvula de escape ante la enfermedad. Quizá por ello le concedieron el premio Nobel (más merecido en mi opinión que el de Cela, pero este es ya otro debate).

oscar -

Aun a pesar de que Nietzsche falleciese a consecuencia de un inquietante "reblandecimiento cerebral", no puede uno evitar pensar (precisamente por mantener la mente abierta) si este muchachote bigotón reñido con cualquier alegría podía tener algo de razón.
Viene esto al hilo de la idea de "destruir para poder crear", idea terrible, pero con ella se ha escrito el libro de la vida sobre la Tierra. Huir de lo ortodoxo para poder descubrir nuevos caminos es un medio de conocimiento, los cuadros de Dalí o los dibujos de Escher son un ejemplo. Pero recurrir al mal gusto e incluso a la violencia verbal como método "creativo" es como pretender mejorar una paella a base de aderezarla con pis y vómitos.
El surrealismo es sabroso y digerible, pero en exceso pudo envenenar a un pobre burro imaginario cuyo pecado fue encarnar la ternura que nos falta a los burros de dos patas. Me pregunto si Pepín Bello, entre coz y rebuzno, nunca sintió la inquietud de saber hasta qué punto hombres y burros se parecen, imaginando cómo se hincharía su propio cuerpo cuando a él le llegase el inevitable momento de ir al barranco. Es entonces cuando descubrimos cuánto nos parecemos los hombres a las piedras, a los burros, y al Resto de las Cosas.

macarro -

A mi me parecen las rabietas de juventud de dos que persiguen la notoriedad en unos años de rebeldía estúpida

pillo -

yo personalmente no encuentro ni arbitraria, ni inmoral, ni histerica a Platero y yo. Cosa que en cambio si veo en algunos de los cuadros o peliculas de esos dos.
Me parece bastante absurda la explicacion que dan y creo que se trata de un experimento mariano para probar a la gleba.

Toñín -

LA NIÑA CHICA

"La niña chica era la gloria de Platero. En cuanto la veía venir hacia él, entre las lilas, con su vestidillo blanco y su sombrero de arroz, llamándolo, dengosa: "¡Platero, Platerillo", el asnucho quería partir la cuerda, y saltaba igual que un niño, y rebuznaba loco.

Ella, en una confianza ciega, pasaba una vez y otra bajo él, y le dejaba la mano, nardo cándido, en aquella bocaza rosa, almenada de grandes dientes amarillos; o, cogiéndole las orejas, que él ponía a su alcance, lo llamaba con todas las variaciones mimosas de su nombre: "¡Platero! ¡Platerón! ¡Platerillo! ¡Platerete! ¡Platerucho!"----

Platero y yo

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TODO
----- Al mar y al amor-----

Verdad, sí, sí; ya habéis los dos sanado mi locura.

El mundo me ha mostrado, abierta y blanca, con vosotros,
la palma de su mano, que escondiera tanto, antes,
a mis ojos abiertos, ¡tan abiertos que estaban ciegos!
¡Tú, mar y tú, amor, míos,
cual la tierra y el mar fueron antes!
¡Todo es ya mío ¡todo! digo, nada es ya mío, nada!------

Diario de un poeta
recién casado